Sobre la naturaleza cuántica de la fuerza gravitatoria I

Resumen

La verdadera naturaleza de la fuerza gravitatoria aún permanece desconocida. Sus efectos están correctamente descritos por la teoría newtoniana y de la relatividad general, pero ambas solo nos dicen que reside en la masa. A mayor masa, mayor fuerza gravitatoria. Aproximadamente durante los últimos 50 años, la comunidad científica ha intentado conciliar la teoría de la relatividad general con la teoría mecánico-cuántica, sin éxito hasta el momento. Y una de las más recientes propuestas la definen como una fuerza emergente asociada a la entropía del universo.
De otra parte, desde el modelo estándar de partículas físicas se incluye al gravitón, como su partícula transmisora, dentro de la familia de los bosones, introduciendo así su posible naturaleza cuántica. Pero su comprobación experimental no ha sido verificada.
Con este artículo iniciamos la presentación de la Teoría Cuántico-Gravitatoria partiendo de dos premisas:

1-Las teorías newtoniana y relativista solo describen los efectos gravitatorios de la masa.

2 -Las propiedades gravitatorias atribuidas a la masa residen en sus componentes fundamentales: los nucleones.

En este, primero de una serie de tres, exponemos su formulación mecánico-cuántica en donde se atribuyen a los nucleones (protones y neutrones) el origen de la naturaleza cuántica de la fuerza gravitatoria.
La masa de los quarks de valencia (u, d) del protón supone menos del 2% de su masa total. Las únicas propuestas para explicar este hecho proceden desde la QCD, que atribuyen el 98% de masa restante a la energía generada por gluones y quarks s (sin valencia), generados en su interior.
Nuestra propuesta la atribuye a una oscilación armónico-cuántica de los quarks componentes de los nucleones y la subsecuente emisión de pulsos gravitatorio que son transmitidas al medio en forma de quantums gravitatorios. Es como se manifiesta y enlaza gravitatoriamente la materia bariónica.
Esto supone una nueva visión nueva de las teorías newtoniana y de la relatividad general, sin que ello suponga sus cuestionamientos, como se podrá comprobar en los próximos artículos sobre la formulación cuántico-newtoniana y la formulación cuántico-relativista.